martes, 31 de marzo de 2009

Mi turno

En mi defensa quiero decir que:
  • Las películas de la biblioteca son un buen barómetro sobre qué temas interesan a la gente de mi barrio. (Y a mí me interesa también saber sobre el ecosistema que ahora nos rodea. Eso incluye desde canguros, hasta señores del parlamento, pasando por el documental que se ha olvidado mi santo, uno sobre los orígenes de personas famosas australianas. O el best one: The sounds of Auss, sobre los diferentes tipos de acentos aquí y el interés que tienen en diferenciarse de los acentos inglés in americano.)
  • Las películas de la biblioteca son gratis. Eso también influye a la hora de sacarlas. No se pierde tanto si te arriesgas un poco.
  • Las películas de la biblioteca son, al contrario de la tele y la radio, muy majas conmigo; porque si no has entendido algo revobinas y te lo repiten las veces que haga falta. Además, suelen venir subtituladas.
  • Las películas de la biblioteca las saco yo. Mi santo no va porque a las horas que aterriza en el barrio la biblioteca ya está cerrada. Por tanto, si yo voy, yo elijo.
He dicho!

1 comentario:

Anónimo dijo...

No te olvides la "saga" de los "Crocodiles Dundee", dignas de mención entre cutreces donde las haya. El gran Paul Hogan, ja, el cartón piedra más característico de Australia.
No todo va a ser rollito intelectual, eh Sandra? tanto animalito y parlamentos y scrables!!!
Ah, crec recordar una sèrie bastant bona, ara va de debò, d'una familia d'advocats de Sydney, era històrica i estava força bé. Investiga.
Val a dir que aquí les pel.lis de la biblio també són gratis. Sóc una asídua, hi ha coses actuals i força interessants. No cal anar a les antípodes. A Barna es porta molt això, els videoclubs van desapareixent....

una abraçada pel-liculera
T