miércoles, 1 de julio de 2009

Hay que matar el tiempo...




Pues sí. Ya hace frío. No es un frío como el de Barcelona o -supongo- el de Buenos Aires porque no es húmedo. Y además, como viene siendo la tónica hasta ahora, las temperaturas son poco constantes: por la mañana hace fresquito; a mediodía brilla el sol y la gente se pasea con una manga boba de lo más valiente; por la tarde quizá llueve un poco, quizá no; y al anochecer bajan las temperaturas otra vez (o no). Así que nos hemos resfriado. Y digo 'nos' porque la encargada en actualizar esta familia soy yo. Por tanto yo lo he pillado primero. Me pasé la semana pasada arrastrándome por los rincones pero el sábado, valiente yo, me fui a clase de inglés. Así que aún no he fet net. Y ayer cayó mi santo. Pero su caída ha sido más estrepitosa. Pobrecito mío... ya se sabe, los hombres soportan menos el dolor ;-)

Pues nada, toda esta intro sin más importancia para venir a decir que hay pocas novedades. Mi santo trabaja, yo busco trabajo, y mientras tanto voy haciendo pequeñas incursiones a la cocina. Con la cabeza allí (no sólo en el chorizo y el jamón serrano, también en mis niñas, mi hermanita pequeña, mi museo -que parece que soy yo la dueña por como lo digo-, y cositas así.
Anabel se examina, Esther se muda, Silvia aprueba todas en junio, (perdón, Víctor), y Bego italiano!, Gemma le planta cara a lo que haga falta, Laia y Emma también... las echo de menos mogollón. Ay! que me pongo tonta como dice la rubia! :-)

Bueno pues eso, que para pasar el rato hago cupcakes, cookies y otras cosas que allí están, o no, pero que si están se llaman diferente.
Qué lastimica que no esteis más cerca para probarlas y reirnos un rato!

2 comentarios:

Anabel dijo...

pues sí, que pena no estar cerca, porque tienen una pinta que dan ganas de darle un bocado a la pantalla del laptop.
Dale duro con el trabajo, que el que la sigue la consigue. yo acabo el lunes ¡ya! y que sea lo que dios quiera, tú, que una ya no estira más el cerebro.
Y tu santo no es el único en caer, que el mío le dio por estar a 39 y pico estos días y sí, ¡qué pesados los hombres enfermos!
que también te echo de menos y sigue cocinando así de rico, que cuando vuelvas te vamos a contratar de catering.
mmuaack

Anabel dijo...

por cierto, no sé si es verdad la leyenda del mosquito tigre, pero estoy atacá de picaduras!!